El Sitio de mi Recreo

Lo bueno no fue lanzar el dado de apostarse el cielo aunquesóloseaporunamirada y que saliera el cinco... lo mejor ha sido conservarlo en el bolsillo, jugar con él entre mis dedos hasta encontrar el momento adecuado de atreverse a lanzarlo con los ojos cerrados, sin dudarlo siquiera... que saliera él solo de mi bolsillo, como empujado por una extraña fuerza...

En el ecuador de los que miden el tiempo en años, tengo la impresión de conocerte de siempre sin conocerte todavía... Eres como un crucigrama sin hoja de soluciones: cuando no atino, me desespero, y cuando acierto, me paso el día pensando en la siguiente palabra para continuar este reto con una sonrisa en los labios...

Sigo siendo muy afortunada, aunque a veces se me olvide... Tengo la suerte de ser yo con quien sueñas de cuando en cuando... soy yo a quien llamas cuando tienes miedo para volver a casa... a quien besas, a quien buscas bajo la ropa, a quien le llamas idiota y vieja...

Me encanta verte reír... que se te quiebre la voz entre carcajadas... una veces riéndote de mí y otras conmigo... Me gusta mirarte y re-mirarte... verte desde todos los ángulos y posturas habidas y por haber... encontrar gestos y muecas nuevas, y reconocerte en las que ya me sé de memoria... Y vendo mi alma al diablo simplemente por verte llegar... me fascina verte llegar de tu vida a mi vida sin ti y compartir nuestro tiempo... empeñarnos en empeñar este empeño por compartirnos... megustamegustamegusta... ME GUSTAS...

Soy una afortunada porque es a mí a quien le susurras que quieres escaparte un fin de semana conmigo... sólo conmigo... sin nadie más... y abrazarnos sin ropa, sin tiempo... piel contra piel... tú contra yo...

Podría seguir y seguir, pero tengo que recordar que soy una tipa dura... de ésas que llaman borde a la primera de cambio... a las que se les prohíbe echar merengue por la nariz porque pierden puntos por el camino... Hay que guardar las falsas apariencias: ñoña sí, pero sin rozar lo cursi... eso nunca... jamás de los jamases...

Lo mejor de lanzar el dado azul de apostarse el cielo aunquesóloseaporunamirada no fue que saliera el cinco... lo mejor fue verlo entre tus labios dicéndome que fuera a buscarlo... sin manos y sin dobleces... lo mejor fue verte bajar tu primer tobogán... dar nuestro primer paso de la mano...

Y en esas seguimos... improvis-ando... siempre... todavía...